Proceso de producción de plásticos amino - Fábrica Johnley
August 13 , 2025
Las resinas amínicas, también llamadas aminoplásticos, son polímeros termoendurecibles que se forman mediante la condensación del formaldehído con compuestos que contienen grupos amino, como la urea o la melamina. Su proceso de fabricación consta de tres etapas principales: metilolación (o hidroximetilación), condensación y curado.
Una mirada más de cerca a cada paso:
1. Metilación/Hidroximetilación:
En esta primera fase, el formaldehído reacciona con sustancias amínicas (p. ej., urea o melamina) para añadir grupos hidroximetilo (-CH₂OH). Generalmente, se lleva a cabo en una solución acuosa con un pH y una temperatura cuidadosamente regulados.
2. Condensación:
En el segundo paso, los compuestos hidroximetilados se unen, creando una red polimérica y liberando agua. Variables como la temperatura, el pH y la proporción de reactivos influyen en el desarrollo de este proceso.
3. Curado:
La etapa final es el curado, donde la resina se calienta junto con un agente de curado para endurecerse y adquirir su forma termoestable permanente. Esto suele realizarse bajo presión dentro de un molde.
Se fabrican mediante la reacción de urea y formaldehído, a menudo mediante un proceso de condensación de varias etapas. Se utilizan ampliamente como adhesivos en productos de madera como tableros aglomerados y contrachapados.
- Resinas de Melamina-Formaldehído (MF):
Producidas a partir de melamina y formaldehído, estas resinas son valoradas por su dureza, resistencia al calor y al agua. Se utilizan en artículos como vajillas, laminados y componentes eléctricos.
Métodos de moldeo para plásticos amino
Los plásticos amino se pueden moldear en diversas formas utilizando varias técnicas:
- Moldeo por compresión:
Este método clásico se sigue utilizando para la fabricación de vajillas de melamina. En este método, el material se calienta y se prensa en un molde para tomar forma.
- Moldeo por inyección:
Aunque las resinas amino (como las termoestables) pueden moldearse por inyección, se requiere un control preciso de la temperatura. El material se inyecta en un molde caliente, donde se cura.
- Otras técnicas:
Dependiendo de la aplicación y la forma final deseada, también se pueden emplear métodos adicionales como extrusión y fundición.